domingo, 7 de febrero de 2010

Confesiones de un chef XVIII

Como pasa el tiempo, ya casi un mes en este sitio y parece un año, jajaja. Tan poco tiempo y tantos cambios, pero todavía queda muchísimo trabajo por delante.
Ayer por la tarde estuvimos moviendo un horno de sitio y poniendo en funcionamiento otra cocina, a la cual le hace falta una limpieza interior ya que los fuego no van bien, tiran poco y se apagan, pero bueno ya disponemos de mas fuegos y podremos elaborar mejor o eso espero, jejeje.
Con el paso del tiempo me he dado cuenta de que no existe unidad ni pensamiento de grupo en este sitio, cada uno va a su propio interés y ni la sala ni la cocina piensan como un todo, sino independientes y todo para su propio beneficio, lo cual al final es contraproducente para el resultado final y el cliente se va descontento.  La cocina es el motor del restaurante y la sala los ojos, deben trabajar conjuntas. Otra cosita mas a apuntar en la lista de cosas a cambiar. Con paciencia y buena letra, este proyecto tiene que triunfar y estoy convencido de que será así.
La mala noticia del día es que creo que la apertura del nuevo restaurante se va retrasar unos días y ya no será para el uno de marzo...una pena 

1 comentario:

  1. Bueno, lo importante es que al final se abra...yo creo que sería la primera estimación de tiempo de un proyecto que veo que se cumple, jejeje

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